Comprendelo...

Esto es para una amiga...que no sé si lo va a leer o no, pero... Simplemente necesito escribirlo. Porque ya no doy más.

Hago mi rutina. El timbre del recreo, que estuve esperando durante dos horas. Desde el tercer piso, bajo al primero, corriendo, como si de eso dependiese mi vida. En cuanto llego a la puerta, que siempre está abierta, me asomo por el marco, con toda la energía posible, y una sonrisa en mi rostro. Porque te voy a volver a ver. O eso pienso. Pero, cada vez que veo el aula vacía... No, vacía no es la palabra. Porque hay mucha gente. Gente que conozco, algunas amigas más importantes, y otras personas que son sólo conocidos. Pero, ¿Dónde estás vos? "Se fue, ya conocés a Teff", dice Lin sin mucha atención en sus propias palabras. Entonces, me saluda, y sigue hablando con quien fuese, o bien me dice algo a mí. Mii, por su lado, se sienta a escuchar música. A veces charla, pero nunca conmigo. Reprimo mis lágrimas. Reprimo mi "¿Y qué nos pasó?" Y me doy vuelta para hablar con Flor. Pero, al minuto, me doy cuenta de que no sirve. Así, me siento en tu silla, y agarro tu carpeta. "Hoja en blanco, hoja en blanco..." murmuro, hasta detenerme en encontrarla. Entonces, también agarro tu lapíz, de esos HB que abandonaste hace bastante por tu lápiz de mina. Y, con eso, escribo, primero, lo más importante. "Te Amo". "Te va a matar" dice tu compañero de banco, pues nadie toca las cosas de Teff, o al menos así lo hace sonar él."Nah", le respondo vagamente y sigo con lo mío. "Te Extraño", sigo, "sabías qué pasó hoy? Fer dijo...";"Podés creer lo cararota que es Hernán? Hoy me dijo..." "Ahh!! Y deberías visto a Lavalle!!". El final, si no me equivoco, es siempre el mismo. "Suerte con todo!!! Que te pongas mejor~ Porque te necesitoooo T^T". Siempre me tomo unos 5 minutos para dibujarte algo al costadito o entre frases. Como es de esperar, aún cuando toca el timbre que marca el final del recreo, no estás. Flor sube sin mí, no quiere llegar tarde a clase. Te espero, 5 minutos. No llegás. Y, finalmente, subo, con un humor muy difícil de empeorar.

En el segundo recreo, pasa exactamente lo mismo. Sólo que, es entonces, bien al final de ese recreo,que puedo verte, y, decirte, por lo menos, “Chau”. Y, aún así, lo único que recibo es un “Chau”. Ni un abrazo. Ni un te quiero. Ni siquiera un gracias por la cartita. Es lo único que nos decimos en el día. Vos me dijiste, que si te mando mails, me los vas a responder. Y no lo hacés. Dijiste, que no tiene nada que ver conmigo lo que te pasa. ¿Y entonces? No entiendo. Hago lo que puedo para ayudarte, pero nunca escucho nada de tu parte. No sé, siquiera, cuál es tu problema. Te lo pregunté varias veces. “Nada más necesito estar sola”.

Y, lo peor es, que no sos sólo vos. Mii… ¿Qué pasó? ¿Quién era la que hace medio mes tenía miedo de separarse? Y Lin… Lin, hace lo que puede. Pero vos… En estos momentos, te necesito TANTO… Es difícil. Me desgarra. Hace 2 semanas que lo único que nos decimos es “Chau”. Ya intenté hablarlo, intenté de todo. Sólo me queda esperar. Seguir con mi rutina. Soñar con que los pequeños mensajes que te dejo te lleguen.

Aún cuando te dije todo esto… me dijiste,que por esta vez ibas a ser egoísta, que no me meta. ¿Sabés cuánto duele? Pero qué sentido tendrá, escribir esta carta si no la vas a leer…

[Fuiste vos, la que me hizo prometer que no nos íbamos a separar. Fuiste vos, la que dijo “Mientras estés interesada en mantener nuestra amistad, vamos a seguirla, porque yo no quiero perderla”. ¿A dónde quedó todo eso?]